La Casa Muda
Por: Wen Acero
Argumento
Laura y su padre Wilson son contratados por Néstor, un viejo amigo de la familia interesado en reacondicionar su casa campestre ubicada en un lejano paraje de Uruguay. Debido al gran trabajo que implica y a la hora que es, Laura y su padre deciden irse a dormir de inmediato con la intención de empezar la restauración muy temprano.
Todo parece estar tranquilo, hasta que Laura escucha unos inquietantes ruidos a las afueras de la casa, que misteriosamente se transportan al segundo piso del inmueble. Asustada, avisa a su padre para que revise qué ocurre, lo que no saben es que esto desatará la tragedia.
Director: Gustavo Hernández
Año: 2010
País: Uruguay
Crítica:
La Casa Muda es un hito para el cine de terror Uruguayo y un gran aporte para el género, por ser la primera película filmada en su totalidad con una cámara fotográfica, realizada en una sola toma, y ser el único film uruguayo de su tipo en tener un remake estadounidense llamado “The Silent house”, lanzado en 2011.
Resulta sumamente interesante el papel que juega la fotografía dentro de la historia, no solo por ser grabada con una cámara Cannon EOS 5D Mark II, sino porque utilizan fotografías POLAROID para hacer hablar a “La Casa Muda”. Es precisamente este el elemento que más brilla en el film, ya que inicialmente podríamos pensar que la protagonista es únicamente Laura, pero poco a poco nos damos cuenta de que también lo es la casa, la cual transmite lo que sus paredes han presenciado mediante fotografías.
Esta cinta además de ser novedosa en su producción, lo es en su relato, ya que siempre observamos un ángulo en primera persona y se nos aportan muy pocos datos para entender el papel que juega cada protagonista. Lo verdaderamente impresionante es que en ningún momento es importante profundizar en la vida de los personajes, ya que tienes lo necesario para sacar tus propias conclusiones, por lo que es vital no perder detalle alguno, ya que mucha información viene oculta sutilmente en objetos e imágenes.
“Terror real, en tiempo real”, slogan de La Casa Muda, es lo que tendremos en los primeros 78 minutos, otro punto a resaltar de este film ya que el tiempo que transcurre en la realidad es el mismo de la historia, lo cual es novedoso para cualquier espectador acostumbrado a la temporalidad típica del cine tradicional. En todo momento se respira el miedo, esto se debe a tres elementos esenciales: por un lado se construye desde el comienzo una atmósfera gris, con una gran carga psicológica y emocional, y pocas pistas sobre lo que puede ocurrir; por otro lado tenemos una gran secuencia no editada, lo cual le otorga gran realismo; y finalmente, saber que la película está inspirada en un hecho verídico ocurrido en Uruguay en 1944.
Según relata Gustavo Hernández, hace algunos años se enteró sobre un extraño caso de dos hombres torturados y asesinados, cuyos cuerpos fueron hallados en una alejada casa campestre ubicada en la localidad de Godoy. Lo que verdaderamente llamó su atención sobre este suceso fue una serie de fotografías Polaroid que la policía encontró en la escena del crimen, las cuales plasmaron las escalofriantes torturas infligidas a las víctimas y fueron las únicas pistas obtenidas. A pesar de la evidencia, nunca se llegó a esclarecer lo acontecido en esta casa, y mucho menos a atrapar al responsable de tan salvaje homicidio.
Lastimosamente las fotografías se perdieron en los archivos, las investigaciones fueron infructuosas, y la información dada en los medios fue confusa, por lo que este caso se perdió en el tiempo, convirtiéndose en una Leyenda Urbana que Gustavo Hernández junto con Gustavo rojo decidieron revivir. Después de documentarse bien sobre el caso y hacer una búsqueda ardua en las “páginas policiales”, este par de jóvenes crearon una hipótesis sobre los minutos finales de estos hombres, misma que plasmaron en “La Casa Muda”.
En este punto es importante aclarar una confusión que se ha gestado, mucha gente ha criticado duramente a esta cinta argumentando que resulta absurdo pensar que está basada en esta historia, ya que nadie sabe qué pasó a ciencia cierta y hay quienes dudan de la veracidad de la misma. Pues bien, hay que señalar que está inspirada mas no basada, es simplemente lo que Hernández y Rojo creen que pudo ocurrir en dicha casa, los últimos 78 minutos de vida de las víctimas; por otro lado, la historia es real y se encuentra documentada en los periódicos de la época y memorias de la policía.
Para finalizar podemos decir que estamos frente a una obra maestra del terror psicológico, que ubica en la pantalla nuestros miedos más primitivos y logra conectarnos con las sensaciones que Laura transmite. Un gran aporte para el cine y orgullo latinoamericano.
La secuencia: Lo impactante de esta producción es que la totalidad de la historia es una secuencia, donde no encontramos cortes (50 minutos), salvo al final de la cinta.
La Imagen: Las imágenes aterradoras que se alcanzan a detallar con el flash de la Polaroid, cuando Laura está en completa oscuridad.
Lo Bueno: El concepto diferente de la película, su forma narrativa muy y su temporalidad (Tiempo real)
Lo Malo: Nunca especifican que lo expresando en la película es tan solo una hipótesis sobre los últimos minutos de los hombres que aparecieron muertos en la historia real, lo cual ha generado confusiones y malas críticas.
Curiosidad: Durante el rodaje, algunos miembros del equipo dejaron de entrar a algunas habitaciones de la casa, ya que aseguraban que las cosas se caían, y las puertas y ventanas se abrían solas. Se sentía un ambiente muy tenso.
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